Entrada BIOGRAFÍAS Paul Robeson: El Inesperado Padrino del Movimiento por los Derechos Civiles
Paul Robeson: El Inesperado Padrino del Movimiento por los Derechos Civiles PDF Imprimir Correo electrónico
Escrito por H. LEWIS SMITH   
Jueves 08 de Septiembre de 2016 17:45

“Lo vuelvo a preguntar”-dijo desafiante, “¿deben los aparceros Afro-americanos del Misisipi ser enviados a derribar campesinos de piel morena en Vietnam […] para cumplir los intereses de aquellos que se oponen a la liberación Afro-americana nacional y a la liberación de las colonias en el extranjero?”- Paul Roberson.

El perspicaz Paul Robeson fue precursor de Malcolm X o MLK en la valiente lucha por los derechos civiles (del 9 de abril de 1898 al 23 de enero de 1976). Robeson fue cantante, actor, activista social, abogado y atleta. Su antigua universidad fue Rutgers College donde destacó en atletismo, baloncesto, fútbol y béisbol. Se convirtió en una transcendente figura internacional que inspiró los corazones y llegó al alma de personas de todo el mundo y sobre todo de los Afro-americanos. Su talante cosmopolita se puede atribuir a sus múltiples papeles como activista político, artista, cantante y actor además de su capacidad de conversar en alrededor de 20 lenguas diferentes1. Fue un líder visionario que se sacrificó enormemente por su eterna devoción por la causas contra el racismo, por la paz y por el socialismo, lo que hizo de él un pacifista…y el Padrino del Movimiento por los Derechos Civiles de los 60.

Como actor, Robeson quiso interpretar el papel de Joe Louis pero Hollywod se opuso a que un hombre Afro-americano apareciera noqueando un boxeador blanco. Hizo varias películas y dos de ellas le marcaron bastante: “Sanders of the River” y “Tales of Manhattan”. Robeson empezó su cruzada como defensor de su pueblo- prueba de que estaba en un momento crítico de su carrera pública- en cuanto se dio cuenta de que se había equivocado al hacer esa película y se arrepintió de haber participado en ella.

Por eso la crucial llamada de la injusticia social le llevó a abandonar el teatro y Hollywood para convertirse en uno de los activistas políticos más importantes de su generación. Defendió el anti-imperialismo y el comunismo, también criticó el gobierno americano y eso le llevó a estar en la lista negra de la época McCarthy. En septiembre de 1946, Robeson atacó efusivamente diciendo que América era hipócrita al acusar en Nuremberg a la chusma de ser racista mientras que hacía exactamente lo mismo en casa. Dijo: “Lo que está ocurriendo en Nurenberg es una farsa democrática ya que están siendo asesinados americanos por el mismo tipo de hombre que está ahora en ese juicio.”

Pocos años después, Robeson envió una petición a las Naciones Unidas que acusa a América de genocidio contra los Afro-americanos. En ese mismo momento, los EE. UU. estaban acusando a los campos de concentración por violación de los derechos humanos así que se le dio mucha importancia a esta petición que resultaba ser otro ejemplo de la hipocresía y brutalidad de Washington. Sirvió para llamar la atención a las autoridades y pedirles una respuesta al horrible maltrato de los Afro-americanos asentando así las bases del llamado “Movimiento por los Derechos Civiles”. En este proceso histórico, Robeson inadvertidamente hizo el papel de chivo expiatorio. Su fuente de ingresos, su carrera y su salud quedaron deterioradas…al mismo tiempo que la gente por la que se sacrificó…vio incrementar su fortuna… Jim Crow perdió gradualmente sus bonos de finanza.

Respaldó de todo corazón la proposición de la Unión Soviética de tipificar la discriminación racial y el odio como delito lo que situó al presidente Truman en una zona de riesgo legal. Robeson fue constantemente criticado sobre lo que se llamó la Doctrina Truman; en un momento tuvo un cara a cara con Truman y le hizo hablar de los numerosos linchamientos y mutilaciones de Afro-americanos en uniforme militar. Este intercambio de palabras duras hizo que Truman se enfadara, golpease la mesa con su puño y como reprimenda confiscó el pasaporte de Robeson por varios años.

Las críticas de Robeson hacían enojar, sobre todo aquella en la que opina que América es hipócrita al estar “construida bajo la esclavitud” mientras que al mismo tiempo ataca los campos de concentración. Robeson gozaba de integridad, pasión, inteligencia, sentido común, compasión y fortaleza mental y física y no iba a dejar pasar; no iba a permanecer sentado en silencio ante la injusticia social que atañe a su propio pueblo- como otros podían hacer tranquilamente.

Robeson apareció ante el House Un-American Activities Committee y declaró que había leído mucho sobre Marx y su régimen, que realmente no nació en Rusia sino en Inglaterra. Atribuyó su educación política y marxista a su afliliación al Partido Laborista Inglés. El Committee trató una y otra vez de hacer que Robeson firmara un juramento que denunciase el comunismo y él se opuso cada vez sin admitir ni negar que era Comunista.

Robeson estaba bajo arresto domiciliario, la mayoría de los americanos lo consideraban un enemigo de los Estados Unidos. Fue convocado a Washington en numerosas ocasiones para declarar ante el Congreso sobre su supuesto Comunismo y subversión de la nación. En cuanto a sus viajes a Rusia, dejó claro que él podía caminar por la Tierra como un ser humano completamente digno y no mostró ningún arrepentimiento sobre sus visitas a este país. Una vez afirmó que Rusia era el único lugar del mundo donde se sentía como en casa.

Como consecuencia de estar en la “lista negra” por ser simpatizante del comunismo, Robeson se vio abandonado y perdió el apoyo de organizaciones Afro-americanas como NAACP, Ebony Magazine, los periódicos principales, etc. Algunas figuras Afro-americanas de alto nivel se apresuraron a denunciarle, como Jackie Robinson y Don Newcombe- pitcher de los Brooklyn Dodgers, en un momento en que Robeson fue convocado a declarar ante el House Un-American Activities Committee. Y ahí fue donde Robeson reveló que conocía a Jackie Robinson y que él mismo fue una de las personas que pidió a Judge Landis (comisionado de béisbol) que diera una oportunidad a Jackie Robinson para que jugara al béisbol, pero la respuesta que recibió por parte de Robinson y de Newcombe fue el rechazo. Carl Rowan, un embajador estadounidense Afro-americano en Finlandia, afirmó una vez que Robeson había traicionado a su propia raza.

Sin embargo, no todos los Afro-americanos se alejaron de Robeson, por ejemplo, Sidney Poitier y Harry Belafonte le brindaron mucho apoyo. Poitier en especial fue muy halagador con Robenson con afirmaciones como “la riqueza de la cultura Afro-americana no ha recibido una expresión tan fina como en la carrera de Paul Robeson.” Después, en el año 1978, Poitier habló de cómo él y Belafonte solían hablar con Robeson en las calles de Harlem, simplemente caminaban y hablaban de muchos temas: política, arte, raza, África, etc. Poitier encontraba que Robeson tenía una inteligencia sorprendente y un fuerte compromiso y que causaba un gran impacto cada vez que hacía de actor.

EN MEMORIA DE PAUL ROBESON (1898-1976) Y DE LOS MUCHOS ACTORES AFRO-AMERICANOS QUE SOPORTARON EL HUMILLANTE PROCESO BLACKFACE2  EN AMERICA

Para obligarlo a quedar inmovilizado y en silencio, América denegaba continuamente a Robeson su pasaporte porque cada vez que iba al extranjero criticaba el tratamiento hacia los Afro-americanos. Posteriormente, en mayo de 1954, la Corte Suprema de los EE. UU. decretó que Jim Crow ya sería legal.

El fuerte internacionalismo de Robeson y su pasión por el estudio de lenguas y culturas dieron lugar a un estallido de justicia poética cuando una gran ola de gente pidió que se le devolviera su derecho a viajar. Muchos países extranjeros ejercieron una gran presión- México, Rusia, Inglaterra, Israel, China, Japón, India, Ghana, Nigeria, etc.-sobre Washington para que devolviera a Robeson su pasaporte.

Robeson ha alcanzado el estatus de leyenda por su popularidad en el extranjero y, sorprendentemente, cuando llegó el momento de rescatarlo de los ataques de sus antagonistas, la comunidad internacional intervino a su favor creando una onda expansiva difícil de ignorar, sobre todo para las figuras relevantes del ámbito religioso.
Reaccionando a la presión internacional en 1958, el tribunal supremo se apaciguó y decretó que no se podía negar el derecho de viajar a Robeson. En los 8 años que no pudo viajar, Robeson recibió muchas cartas de simpatizantes de todas partes del mundo, sobre todo de Gran Bretaña y de la Unión Soviética. El hecho de ser cruelmente perseguido y tratado como un paria en casa ha sido considerado como una de las consecuencias más vergonzosas de la Guerra Fría.

En esta época de cambios, se está dando un resurgimiento de la figura de Robeson y un rechazo…o protesta….contra aquellos que lo habían repudiado. Así, Malcom X- símbolo del activismo Afro-americano y que fue una consecuencia directa del sagaz Robeson- reprendió a Jackie Robinson, la estrella de béisbol, que había denunciado al artista ante la HUAC diciendo “Usted fue quien se dejó utilizar por los blancos”, Malcom contraatacó diciendo “Usted se lo permitió […] usted dejó que su jefe blanco le enviara a una audiencia legislativa para confrontar y condenar [a Robeson] porque tenía asustados a esos estúpidos culpables blancos.” Retirándose arrepentido, Robinson afirmó con nerviosismo “Rechazaría una invitación de este tipo si me la hicieran ahora. Siento más respeto por Paul Robeson, que sacrificó su carrera y su salud durante 20 años, porque creo que estaba tratando de ayudar sinceramente a estas personas”.

El congresista Andrew Young es recordado por decir: “Gracias por su hermosa vida. Usted mantuvo vivo un legado de esperanza durante los años más oscuros de nuestra historia. Y si no hubiera hecho esto en los 30, 40 y 50, no habríamos conseguido nuestros logros de los 60 aquí en el Congreso y yo no estaría aquí como el primer hombre Afro-americano de Georgia en 102 años”. Paul Robeson podía haber sido el Presidente de los Estados Unidos.

En aquellos años de acoso por parte del gobierno de los EE. UU., numerosos intentos de asesinato y otros atentados contra su vida impidieron que Robeson alcanzará el poder y la presión mental resultante le causó duros estragos, por eso en 1963 su salud se deterioró rápidamente y se vio forzado a retirarse y a convertirse en un prisionero.

[El artículo ha sido traducido al español por Amina Ortega que es, entre otros, licenciada en Traducción e Interpretación.  Pueden contactar con ella en  Esta dirección electrónica esta protegida contra spambots. Es necesario activar Javascript para visualizarla ] .

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1 Enciclopedia de Literatura Renacentista de Harlem, por Lois Brown, pg 467

Nota de la traductora: El término blackface hace referencia al maquillaje teatral empleado para representar una persona de etnia Afro-americana. El blackface trataba de ocultar la auténtica trata de esclavos mostrándolos como personas felices, nada que ver con la realidad social en la que se veían envueltos.  La aparición de este maquillaje data de 1830 y estuvo vigente hasta 1960, año en que el Movimiento por los Derechos Civiles en EE. UU. obligó a prohibirlo ya que era un claro ejemplo de racismo.

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Sobre el autor de esta biografía: El Sr. Smith es un escritor que vive en los EE. UU. El artículo anterior fue publicado originalmente en thyblackman.com. El Sr. Smith ha escrito dos libros titulados: Bury that Sucka, A Scandalous Love Affair with the N-word y Undressing the N-word, Revealing the Naked True About Lies, Deceit and Mind Games (para saber más de estos libros, haga click aquí: https://www.createspace.com/4655015).  También es el fundador de esta página web: http://theunitedvoices.com/aboutus.php.  El Sr. Smith se licenció en la Universidad del Estado de California, Los Ángeles. Pueden ponerse en contacto con él en Esta dirección electrónica esta protegida contra spambots. Es necesario activar Javascript para visualizarla y también pueden seguirle en Twitter: http://www.twitter.com/thescoop1.